JUSTIFICACIÓN
En las últimas décadas del siglo XX varios procesos confluían en lo que se anunciaba como un colapso de las propuestas emancipatorias. La derrota de las luchas latinoamericanas de los años ’70, el auge del neoliberalismo, la exacerbación de la cultura del consumo en un mundo que, paradójicamente, profundizaba la desigualdad, la profunda reestructuración del capitalismo y los cuestionamientos al Estado de Bienestar, la declinación de la hegemonía cultural delas izquierdas y de la influencia del marxismo, la caída de los regímenes del llamado socialismo real eran todos indicadores que reclamaban una respuesta global. Cambio de época, crisis civilizatoria, fin de los grandes relatos de la modernidad, las denominaciones proliferaban para abordar una nueva realidad que tenía que ver tanto con las transformaciones estructurales como con los nuevos modos de la subjetividad.
Mientras perdían consenso las ideas que hablaban de transformaciones profundas y se aprovechaba el bicentenario de la Revolución Francesa para afirmar el anacronismo de la idea revolucionaria, en el mundo ganaban espacio las luchas de los movimientos sociales, se incorporaban a la agenda tradicional de las izquierdas los temas de Derechos Humanos, género, el reconocimiento de la diversidad sexual, la preocupación por el ambiente y los recursos naturales y se ampliaba el concepto de la Democracia que debía hacerse cargo de estos objetivos.
Esta idea de la democracia como proceso permanente de expansión de derechos es uno de los ejes centrales que orienta a los procesos políticos que desde comienzos de siglo han transformado la realidad política y social de América del Sur. ¿Estamos frente a un nuevo paradigma? , ¿Cuánto de las grandes tradiciones emancipatorias está hoy presente en las propuestas de los gobiernos y de los nuevos movimientos populares latinoamericanos? ¿Cómo superar una mera afirmación retórica de las tradiciones de la lucha independentista y del nacionalismo popular?¿Cuánto de cuestionamiento y también de rescate del marxismo, décadas atrás guía teórica indiscutida, en muchos casos integrado en formas novedosas con el pensamiento nacional popular? ¿En qué medida los procesos políticos latinoamericanos incorporan las nuevas temáticas y los sujetos sociales a ellos vinculados? ¿En qué medida, en la Argentina, el actual proceso político apunta a constituir una nueva identidad? Demasiadas preguntas, tal vez, pero todas necesarias.
EJES TEMÁTICOS
- El marxismo hoy: cuestionamientos y replanteos.
- Las tradiciones nacionales populares latinoamericanas.
- Gobiernos populares en América Latina en el siglo XXI y el debate sobre el surgimiento de un nuevo paradigma posneoliberal.
- Nuevos sujetos y reivindicaciones sociales: aportes y propuestas emancipatorias.
- Centralidad de la democracia en el debate político contemporáneo.
- Replanteos teórico políticos a partir de las experiencias revolucionarias latinoamericanas del siglo XX.