La Mansión Seré (también conocida como Quinta de Seré o Atila) Se convirtió entre 1977 y 1978 en uno de los más importantes centros clandestinos de detención de la zona oeste del conurbano. Por allà pasaron centenares de personas que fueron torturadas y desaparecidas bajo la responsabilidad de la Fuerza Aérea Argentina.
El 24 de marzo de 1978, Claudio Tamburrini, Daniel Russomano, Guillermo Fernández y Carlos GarcÃa pudieron escaparse mediante la utilización de frazadas atadas desde una de las ventanas del primer piso de la casa. Todos estaban esposados y desnudos, a pesar de lo cual pudieron burlar los controles y salir de la propiedad en plena noche, envueltos en una lluvia torrencial.
Tras la fuga, la Mansión fue incendiada y dinamitada, quedando de ella sólo una ya inestable fachada y los prisioneros enviados a varias unidades penales.
En el año 2013 se inauguró el Espacio Mansión Seré, que contiene los cimientos del que fuera el Centro Clandestino. Alli funciona la Casa de la Memoria y la Vida y la Dirección de Derechos Humanos. Es el primer caso en Latinoamérica de recuperación para la memoria histórica de un espacio de estas caracterÃsticas. El primer centro clandestino de detención y torturas que se convierte en un lugar de rescate de la memoria, de acción para modificar el presente y de proyección para construir un futuro distinto. Ahora la "mansión" se encuentra en el Gorki Grana.